Franco de Colonia, qué bien huele!


El maestro de capilla Franco de Colonia (c. 1215 – c.1270)  fue un teórico de la música del S. XIII (como no podía ser de otra manera). En su obra más trascendente para el futuro gráfico de la escritura musical Ars cantus mensurabilis (c. 1260) trata sobre la notación mensural de la música.

A esta persona, Franco de Colonia, se le debe el nombre de notación franconiana, que no tiene que ver con los franceses, aunque pudiera parecer si no sabes quien la inventó, claro que siendo de Colonia tampoco se te olvidará su apodo a partir de este momento: el theotonicus. Su aportación aún perdura, aunque con otros signos, pues sentó las bases de determinar la duración de los sonidos, algo que no entraba dentro de las preocupaciones musicales que se apoyaban en la tradición oral y en el material casi siempre repetitivo del canto gregoriano sobre las piezas de nueva creación. La obra de autor contribuyó a otro tipo de necesidades, a la par que los tejidos del contrapunto, no siempre obviables ni mecánicos para solucionar ciertas faltas interválicas.
La estética de las grafías no se desvía de la notación cuadrada, pues las cabezas de las alturas son cuadradas, pero el ruido de las ligaduras en los neumas gregorianos (poco más que para ligar grupos de notas o parecerse a los neumas antiguos) se van a codificar.
Por supuesto, de la cuadrada que dura el doble surge el rectángulo por bandera, que es la máxima o dúplex longa. Es decir, la dúplex longa es el doble que la longa (que es la que nos recuerda a una negra). Después vienen figuras sin plica: Brevis y mínima.

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Es decir, de la línea vertical surge el código que da lugar a las notas de mayor duración, al contrario de lo que sucede hoy día. Sin embargo, las plicas van a aparecer en simetría dentro del conjunto con la irrupción de las semínimas, que ya las tendremos al uso en la notación de la tablatura renacentista(notación blanca)

Los seys libros del Delphin de música de cifras, de Vihuela renacentista (semínimas de dos colores). Publicado por Narváez en Valladolid en 1553.
De la semínima es lo que evoluciona en la plica moderna asociada a las pequeñas (con menos tiempo), y habrá notas con solo cabeza, notas con plica, y uso de colores blanco, negro, mixto (partido)… que explayen el mapa de los símbolos con el tiempo. Pero la notación franconiana se bastaba en un principio de estas cuatro grafías, todas en negro, al menos para un contrapunto esencial de figuraciones pausadas. Los nuevos referentes dan lugar a determinar la duración de un sonido, de forma que la grafía utilizada para anotarlo tiene valor x (duración) propio, tal y como pasa hoy al distinguir una redonda de una blanca.
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Podemos encontrar variaciones del sistema franconiano desde el siglo XIII al XVI, entre otras cosas porque cambian las observaciones sobre el compás (aún sin escribir), o porque hay música con más velocidad que la que es capaz de asociarse a estas figuras. Bien es cierto que hoy día podemos decir Redonda = 240 ppm, lo que la convierte en negra a 60ppm, y después, podríamos ir hacia abajo. Pero da la sensación de que sn metrónomo adjudicaron un tiempo más o menos de sentido propio a las longas figuras del canto gregoriano, o con las que representaban ciertos pedales. O dicho de otro modo o también punto de vista, que era un poco contradictorio romper la lógica de que la llamada longa no fuera longeva al uso.

Consecuencia, una ampliación para florituras ya en el siglo XIV, y que duró hasta el quince, momento en que entra la notación blanca.



En este aspecto, podemos decir que la propia imagen de las figuras da cuenta de si la música es rápida o es lenta, pues el uso de las longas, brevis y máximas nos habla de una música retratada en valores largos, mientras que la música escrita con longas, brevis y semibreves, expresa que las unidades de tiempo son más fugaces.
En otro post, hablábamos de las indicaciones de velocidad de Mudarra, fíjate como se parecen al sistema de símbolos usados para el compás.

Por supuesto que se mueven en contextos diferentes y para usuarios de un nivel musical más bajo, pero añaden el discurso de la velocidad. Con todo esto, me estoy desviando de la notación franconiana, por lo que vuelvo al tema del compás, que en esa época no es el rectángulo que divide los pentagramas.

Otra cosa es que se podía indicar el compás, pero no la barra de compás: al fin y al cabo las notas valían ya un tiempo objetivo para acabar donde había que acabar.
Fíjate que de partir el círculo a la mitad (símbolo del compasillo) sale algo que sigue en boga, pues viene de esto. C = 4x4 y C cortada = 2 x 4 (pues lo de antes son brevis, pero que en notación moderna parecen las negras, o pueden serlo moviendo la pulsación)
OJO: La irrupción de los símbolos de compás determina la división del tiempo, pero no implica que aparezca aún la barra de compás.


Hayli mary1. 1450 apx. Fuente wikipedia
De LukasPietsch - http://en.wikipedia.org/wiki/File:Mensural_notation_Hail_Mary_1.png, CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=13644179
Y ¿Cómo observaban el compás sin escribirlo? Pues si no hay acento, las voces polifónicas encajan porque las notas ya tienen medida. Luego, en base a que existe en la forma de partir el tiempo ese patrón de acentos ternario o binario que se repite a veces es fácil encajar las frases, aunque en música basada en la variedad no se cumple precisamente la repetición de los motivos. Es lo que sucede después, lo cual da lugar a los patrones binarios, ternarios, y los dos tipos de prolación (subdivisión). Los símbolos se basan en el círculo (ver Mudarra, también sale) considerándose perfecta la medida de tres tiempos, luego ternaria, por simbología: la trinidad.
Luego, digamos que el ritmo ternario también es una fuente que ser produce por conjunción de dos figuras que valen una el doble respecto de la otra, lo que lugar al motivo BL y LB de acento tético (a tiempo). Hay pues una época pre-mensural que se lleva el compás (música popular), pero no se escribe. Una época que se lleva la música de varietas, y polifónicamente no encaja con la idea estructurada de los acentos de un compás. Luego, al volver o empezar a componer música polifónica a la matriz de un compás regular (hay música que se adapta), sí podemos ver la presencia del compás como código de una duración y un pulso, pues lo que determina el compás y las subdivisiones son unidades y subunidades de valores relativos.
En la época de los vihuelistas aparece gráficamente el compás en el sentido a lo que nos referíamos antes: la división del tiempo a través de líneas verticales, pero no en la partitura(pentagrama), sino en la tablatura lo que da una apariencia confusa de un mástil de guitarra partido en partes de distinto tamaño. 
Luego, hay que diferenciar la idea del compás moderno y su articulación exagerada en acentos de la pulsación de esta época, pues Tiempo y Prolación son términos alusivos a las unidades de tiempo, y en cuantas partes se subdividen estas, no a la forma de acentuar las mismas, aunque el código de dar y alzar ya está implantado, y el contrapunto se basa en tiempos fuertes y débiles. Más, lo que sucede es que si no hay patrón se rompe el prototipo del compás, al igual que si hay una síncopa el tiempo fuerte del compás no se acentúa. Luego, yo recuerdo el solfeo de niños y que hacíamos Doó Reé… cuando esto pasaba para no perdernos, pero está mal, y a una guitarra, piano… y nota que vaya en decay le es imposible hacerlo, más no es la idea del autor que una negra, blanca… entre dos compases suene de dos veces.
De tal forma, con la hemiolia el compás es en realidad una especie de quimera, pues si es ternario y se divide en dos, la realidad es que en un compás dividido a la vez de dos formas, por lo que paradojas del compás hay varias, aunque si no hay compás la hemiolia es un juego métrico tan simple como que 2x3 = 3x2 y una forma de hacer contrapunto rítmico a la par que el polifónico, o incluso con voces casi paralelas.
(Hemiolia) 
No todos los libros de tablatura de vihuela presentan el compás, y eso que son del siglo XVI, lo cual da cuenta de que por sí solas, bajo cierta intuición o reconocimiento, las piezas se transcribían en función de alturas y duraciones, añadiendo el que la notación en tablatura es técnica.
Sin embargo, podemos ver piezas que sí que lo tienen y que cada vez es más popular el compás del compasillo, lo cual demuestra la tendencia de la que se habla en la historia: el paso de normalización del compás de tres por cuatro (o ternario en general) al compás binario o cuaternario.
A día de hoy lo del cuatro por cuatro es tan tópico que no lo anotamos nunca. Es evidente que si vamos a tocar algo que ya hemos oído esto se producirá de forma automática, luego es una cosa típica de las “no notación”. Si lo raro es el ¾ lo anotaríamos en tal caso, pero con el 4x4 sucede un hecho tan implícito como el de ver la partitura sin clave de Sol y suponerla, aunque sea un tópico ortográficamente reprochable.
Esto marca analogías históricas tales como que la Longa-Brevis, no siempre se apuntara en épocas anteriores (o incluso posteriores) a la irrupción de lo mensural, pues a propósito de repetir esta forma, si haces Do Re Mi Fa, una es L, y la otra es B, el tiempo sabe llevarse al adjudicar sucesivamente los sonidos al tiempo del compás que le toca[1]. Hay que hablar obligatoriamente de que puede haber música bien o mal escrita dentro de algunos manuscritos, tal y como sucede hoy día, o que se ha ejecutado mal, o se han olvidado de poner todos los elementos necesarios. El caso es que toda música de nueva creación, al igual que un ejercicio de contrapunto de la época va a tener relación con el tiempo, con las duraciones, y solo un contrapunto severo 2 a 1, uno 3 a 1, o uno en B-L es algo que en la práctica no se salga de un esquema repetido ya que en la realidad las frases han de ser distintas.
Y es que el uso de nuevo contrapunto (ArsNova) es determinante a la hora de concebir los signos que fueran capaces de mostrar el tiempo, pues son tiempo no hay color ni talea, ni se puede prever una cadencia polifónicamente hablando.
Dado que 1º con la producción de nuevo material sonoro polifónico y 2º con el principio modélico de varietas no se va a componer con motivos repetitivos o tan insistentes como los de la escuela de contrapunto es necesario crear unos símbolos para las duraciones, para cuando lo pensando, compuesto, inventado… sea L B B L y salga tal cual, y no dependiendo de un pie métrico constante o como siempre se hizo: inculcárselo a la memoria.
A pocos hemos pasado de Franco de Colonia a la notación blanca (que no la vió nacer), y sin embargo es fruto de la anterior; la versión 3.0 que diríamos ahora.

Otra cosa que se va a ver es la aparición de los silencios y el signo de puntillo, pero algunas cosas ya parecían de vez en cuando en manuscritos gregorianos, de forma que el recopila lo necesario para cerrar las bases de un sistema capaz de retratar las notas en dos dimensiones dentro del pentagrama: altura y duración.
“Su Ars cantus mensurabilis (Tratado de canto mensural) es un tratado práctico que contiene numerosos ejemplos musicales sobre los diferentes géneros como el organum, el discanto, la polifonía, el conductus, así como los modos rítmicos. Su idea fundamental es que las notas, por su apariencia visual, pueden connotar su duración o valor rítmico, además de su valor melódico o altura.1

Etimológicamente, dado que hay que medir en la escritura la duración de las notas, el sistema franconiano también se denomina de notación mensural, que, a tenor de lo que sucede, es mucho más franco.
Luego, todos los demás signos que han contribuido a cerrar su sistema han contribuido a la franqueza u objetividad de la escritura musical, pues medir los silencios es otro gran arreglo, que hoy día es igualmente obligado dentro de las normas actuales del sistema pautado.
De LukasPietsch de la Wikipedia en inglés, CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=13574816
Ahora bien, antes de llegar al modelo clasicista (siglo XVIII-XIX) y al desarrollo de un sistema de edición que sujeta hasta hoy día la forma de las notas, silencios, claves y demás signos, no hay una estandarización clara de los mismos, y se pasa por distintas modas: las imprentas editan de mil formas, e incluso las cabezas de las notas fluctúan a un lado y otrode la plica.Es decir, no solo hay un modelo d-p para la relación de las figuras plicadas, sino más combinaciones bq..., y en caligrafía musical nos podemos encontrar de todo, pero hoy también.

Dejando claro el proceso de evolución, la notación cuadrada-romboidal es de las mensuradas la más antigua.

Misa de Barcelona, finales del Siglo XIV (ya en pentagrama)

La notación mensural como sistema musical en Europa desplazó al anterior, que se refugió en el canto gregoriano,  como sucedió con el uso del pentagrama. El sistema estuvo en vigor (no en la forma original 100% de Franco de Colonia), pero sin cambios esenciales o determinantes, hasta el siglo XVI.
La notación mensural se vincula a los procesos de evolución musical que se producen desde el Ars Nova hasta el Renacimiento incluyendo a la escuela francoflamenca. 
La captación de la duración de las figuras es también la necesidad y consecuencia de poder captar texturas de arreglos tales como el hoquetus, la hemiolia y ritmos complejos o cambiantes. De esta forma añadió soluciones a la notación modal precedente que si había sido capaz de anotar ritmos, signos de pausa o repetición, había dejado muchos flecos al deberse a solucionar simplemente la problemática notacional de un tipo de música más sencilla, no tan vertical, ni experimental para al época, ni por supuesto tan métrica.
Puedes encontrar información general del tema donde siempre…:
 "Mensural" se refiere a la capacidad de este sistema de indicar ritmos complejos con gran exactitud y flexibilidad. La notación mensural fue el primer sistema en el desarrollo de la música europea que sistemáticamente usaba formas de notación individuales para denotar las duraciones temporales. En esto se diferenciaba de su predecesor, la notación modal, que había sido el primer sistema en introducir una forma limitada de anotar ritmos. Su nombre fue acuñado por los eruditos del siglo XIX en referencia al uso de teoría medieval, retrocediendo al tratado Ars cantus mensurabilis (El arte del canto mensural) de Franco de Colonia (c. 1280).

… claro que si quieres aprender en serio tendrás que ir a los autores de los que hemos aprendido antes: Hopping, Gustav Reese,… (ver bibliografía[2]).



Luego, hay un montón de reglas para entender los grupos con plicas/ligaduras, los recogen de forma sintetizada en la página de Wikipedia, cito literalmente:
“Para las ligaduras de más de dos notas, se tienen las siguientes reglas:
·                     Cualquier cabeza de nota con una plica ascendente a su izquierda es la primera de un par de semibreves (cum opposita proprietate).
·                     Cualquier cabeza de nota intermedia con una plica hacia abajo a su derecha es una longa.
·                     Una cabeza de nota prolongada, el doble de ancha con una plica hacia abajo a su derecha es una maxima.
·                     Cualquier otra cabeza de nota no cubierta por alguna de las reglas antedichas es una breve.
·                     La duración "perfecta" o "imperfecta" de cada nota dentro de una ligadura es resuelta conforme a los mismos principios que para las notas independientes.

Las reglas vienen a desambiguar algunas opciones de escritura mensural que se dan, aún cumpliendo con lo que parece desde el fondo hacer lo mismo. Es decir, es como si yo propongo no hacer la letra H convergente hacia la parte superior para que no parezca una A, o bien esas normas ortográficas que tienen que ver con lo semántico: lo hecho/lo echó…
Con la notación blanca cuadrada la forma de las ligaduras es bastante estricta, algunos signos romboidales tienen la cabeza simétrica en torno a la plica, y no se van a producir muchos trastornos, pero después con la notación clásica observarás que hay música escrita con las cabezas de cualquier manera. En la notación moderna eso no es algo que implique confundirse en altura, pero supone modas o desacuerdos, algo que se pretendía regular con la notación cuadrada en el caso de las figuras plicadas.


No quiero dejar pasar esta entrada, en la que me he centrado sobre todo en aspectos de notación musical, sin hablar del fenomenal recurso empleado en la notación blanca dentro de la tablatura de vihuela, pues plantea un código particular de la misma: se escribe la figura sobre la nota(digitación) en que cambia el valor del tiempo, y no se vuelve a escribir otra hasta que no cambia el valor. Por una parte es una forma excelente de ahorrar información, aunque se haga por ahorrar tipos: ya existía la imprenta y las tablaturas jugaron con ella: no se hacían manuscritas, lo que dió lugar a la difusión popular del instrumento y del repertorio y cancionero que vendían estos libros.
La idea asombra aún en la manera en que se ahorra repetir cosas que por la supuesta repetición no son necesarias, pero es evidente que funciona porque la representación de la digitación de las piezas se basa mucho en una melodía principal: en polifonía habría sido más complicado reducir los símbolos, aunque sin embargo, se hace cuando es necesario al disponer de forma coherente los dígitos bien repartidos por el compás.Es decir, por arriba hay una lógica que actúa en función de la notación blanca y da cuenta de cuando se va a blancas o a negras, pero por abajo a veces hay que entender que el bajo, si es de la armonía dura todo el compás, medio o un poco más que la mínima unidad que se dibuja por ser nota de un acorde.
Un sistema de imprenta para pintar dentro de la partitura las notas de la escala, con sus 8 duraciones, y sus distintas combinaciones polifónicas se iría a los 300 tipos, sin embargo de la manera en que se imprimían las tablaturas la reducción de signos al máximo da cuenta de una labor de estudio muy inteligente y perspicaz; no solo por conseguir un método de representación diferente al de las alturas (método técnico, visual, intuitivo), sino por cómo se redujeron los problemas musicales para poder ser abordados desde la tecnología de imprenta de la época.

Digamos que para que esto se pudiera producir sí era necesario que el tiempo fuera mensurable, pero no tanto la dependencia con el pentagrama, aunque gráficamente sea un sistema parecido al imitar el paralelismo gráfico de las líneas pintando las cuerdas de una vihuela, laúd,...

Como puedes ver el uso de las tres claves ya era una realidad en la notación mensural.
Lo cual tampoco evita por lo que tienen de bueno que se reconozcan, a duras penas, las letras que se supone que son: una Ce gótica con la impronta de un becuadro, una Efe, pero no porque yo lo diga, sino porque funciona como tal, y una G colgada de un lazo. Tienen mucho de gótico y de manuscrito, y los adornos hacen tanto ruido como la sustancia que refleja la letra a la que van asociadas; es decir son una especie de capitulares o mayúsculas con identidad propia, más que unas mayúsculas, y en verdad son claves de Fa, Sol y Do, más que F, G y C, aunque hay algo por debajo que se adeuda con su asociada procedencia. Y es que la imprenta va a generar a mayores que las claves primitivas se expandan a partir de las distintas ediciones de libros musicales del siglo XVI. De tal forma, el floripondio asociado a las claves es algo indispensable, y esto no lo va a reparar el estilo de los símbolos modernos, porque aunque estén ahí la C (K?), la F y la G, en la clave de Do, Sol, Y Fa actuales, también están de aquella manera ¿no te parece?


Koobak [CC BY-SA 3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0/)]
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Ahora, sí podemos decir que la clave de Sol es la más romántica de todas (tipográficamente hablando, porque las otras son muy góticas).

(Si quieres saber más sobre las claves pincha a continuación)
https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_de_la_notaci%C3%B3n_en_la_m%C3%BAsica_occidental

Más, en algunas partes se hereda de la F que se queda en palo y dos puntos |:  ,transvasar los dos puntitos a la clave de Sol para que rodeen la segunda línea. Es un vulgarismo que yo también absorbí durante un tiempo, más cabe que tal vez sea una forma de corregir una mala ortografía de la clase de Sol cuando no ponen el vientre entre los dos espacios inferiores de forma acertada, así sabes que están pensando en 2º línea. Porque hay que decirlo todo, caligrafía y dibujo se enseña en la escuela, y al conservatorio se va con algo de destreza en las manos, pero la clave de Sol a veces se atraviesa más de lo necesario, y lo normal es que salga el sol cuanto antes para empezar a ver las cosas. Luego, también hay quien dice que quien quiere peces se tiene que mojar el culo, y que si no eres capaz de hacer bien la clave y ponerla en su sitio, con las notas te va a pasar un poco lo mismo.
Estamos muy acostumbrados a dar una tecla y que salga un símbolo delicado, complicado, con trazos miles, y eso nos salva hoy día, estamos ¿cómo para pedir hacer virguerías dentro de un convento?
Luego, vemos lo siguiente y pensamos, ¡madre mía, qué chulada!

Y si tienes paciencia y no te da pereza coger el compás y los rotring a lo mejor haces algo parecido a esto…:
Cordier, B. 1391, Tout par compas suy composes. Manuscrito
…aunque no sean John Cage, ni tengas ordenador.
Como por ejemplo este ejemplo:
Crumb, 1972. Spyral Galaxy

Y, cerrando la página, uno se pregunta si vamos para atrás o para adelante.      




[1] Al hablar de determinadas conductas o de perfección en base a la relación de brevis-longa o el compás, hay que tener cuidado, pues hay algunos que se ciñen a las relaciones entre figuras y otros no. Ver Philippe de Vitry. La perfección (cum perfectio… sin perfectio) es algo que va a cambiar de significado por autores y fechas, al igual que sucede con el color y forma de las figuras.

FUENTES BÁSICAS
·         [2] Hoppin, RichardMedieval Music. W. W. Norton, 1978. La música medieval. Akal, 2000.
·         Reese, GustaveMusic in the Middle Ages. W. W. Norton, 1940. La música en la Edad Media. Alianza, 1989.


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